De lo Tradicional a las nuevas TIC´S Parte 1
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De lo Tradicional a las nuevas TIC´S Parte 1

Actualizado: 18 nov 2021

MIGRAR AL USO DE LAS TECNOLOGÍAS DESDE LO TRADICIONAL EN LAS EMPRESAS




Mucho se habla y escribe respecto a las Tecnologías de Información y Comunicaciones, llamadas abreviadamente como TIC’s. Estos son elementos implícitos en diferentes actividades de nuestras vidas, pero ¿Qué tan conscientes somos de su uso, necesidad y ventajas?, ¿Podemos considerar que estamos al día en su implementación y optimización de uso en las empresas?, ¿cómo saber que estamos haciendo todo lo que podemos hacer para utilizar los recursos digitales y las TIC’s lo mejor posible?.


El mundo ha venido cambiando en sus dinámicas de comunicación basadas en herramientas tecnológicas, generando a su vez modelos de consumo diferentes, exigencias de mercado distintos y la necesidad frecuente de revisar nuestros modelos administrativos y procesos, en pro de responder a esos requerimientos y mantenernos en el mapa laboral como empresarios, y hasta como empleados de valor. Por ese motivo es recomendable, de forma periódica, revisar nuestros modelos e historia, para identificar esa evolución que nos ha llevado de lo tradicional al uso de las tecnologías vigentes a este hoy.


¿A qué le llamamos empresas tradicionales? A esas empresas que mayormente se ubican en los sectores artesanal, comercial y de servicios, donde los recursos de funcionamiento son físicos, con una estructura organizativa habitual, que aunque bien cimentada, puede llegar a carecer de la versatilidad necesaria para una adaptación a la velocidad del cambio que exigen los mercados de hoy, pues generalmente cuentan con una infraestructura tecnológica mínima. Ahora bien, si prestamos atención, hasta aquí no se niega su valor, de ningún modo, trabajar bajo este modelo no es malo, es solo una decisión de sus gerentes y administradores de acuerdo a su proyección contextual particular. Pero lo cierto es que, si se quiere sobrevivir y crecer a largo plazo, debemos analizar a fondo e invertir en lo que se denomina: La Transformación digital.


Habilitar una empresa para la inmersión en esa transformación, implica una inversión en nuevas TIC’s, un estudio que abarca las herramientas, el contexto, la administración de los procesos y la preparación o capacitación de los individuos que se encargarán de hacerlo y trabajar en esa nueva empresa; pues hay que ser honestos, no pecar de crédulos al pensar que se trata sólo de invertir en la adquisición de las herramienta, pues se necesitan competencias adquiridas y afianzadas para que esa inversión sea realmente aprovechada, en muchas ocasiones deberá revisar incluso diversos temas como: Idiomas, la ofimática, software de apoyo (Contabilidad, ERP, CRM, etc.), optimización de tiempos y habilidades sociales.



El nuevo escenario global exige de renovación y reconfiguración, primero en lo local, luego en lo glocal y finalmente en la globalidad, pues esta situación de aislamiento causado por un virus (covid – 19, año 2020) puede seguir sucediendo, y nos ha dejado la tarea de tratar de ser más previsivos, aprender a utilizar y optimizar nuestros recursos diversos, especialmente aquellos basados en las TIC’s. Las empresas deberán capitalizar su capacidad tecnológica, revisar su base, no sólo al intentar replicar en lo digital su funcionamiento antes conocido, sino tanto al construir nuevas fortalezas en el cambio, creando soluciones de la mano de empresas que entiendan a las empresas, en aras de hacer esa transformación de forma pausada, organizada, sistemática y consistente, con una asimilación de saberes prácticos que la mantengan sólida, dando tiempo a la adaptación, con conocimientos previos aprovechados, tecnologías absorbidas y más cerca del escenario real de las nuevas TIC’s en el mundo global, pensada en el largo plazo y no como una reacción rápida a una situación imprevista.


Esa Transformación digital, hay que entenderla como un proyecto de todos y para todos, parte de un diagnóstico, tal y como se hace en una auditoría, verificando el sector, el número de empleados, procesos, herramientas ofimáticas, aplicaciones, software, uso de celulares, tablets, redes, gestores, seguridad informática y responsables de estos temas en la empresa, desde la dirección o gerencia se definen los objetivos a lograr, la ruta o etapas a seguir, y en función de esta ruta los responsables, tiempos y recursos asociados.


Tenga en cuenta que este tipo de proyectos es dinámico y práctico, por lo que se está retroalimentando constantemente y la ruta en su detalle (planes y aplicaciones) se ve alimentada por ese feedback. Un resumen de la ruta de inmersión a la transformación digital es:


1. Diagnóstico general (estudio documental, entrevistas, inventario hardware y evaluación final)

2. Áreas de profundización (pruebas, softwares, aplicaciones, datos y análisis TIC’s)

3. Dinámicas de crecimiento digital (página web, redes sociales, administración de redes sociales)

4. Modelos de consumo (ecommerce, pagos en línea, normativa colombiana, plataformas tecnológicas).

Siempre con la Innovación y cultura como valor agregado.


Ejemplos notables de este proceso de transformación los hay en muchos sitios, y aunque hacer benchmarking es bueno, podemos empezar por empresas en Colombia como Avianca con la página web lostiquetesbaratos.com, Bancolombia con Ñequi, y Servientrega con una serie de alianzas, que aumentaron su productividad y competitividad, ellos se mantienen renovando constantemente, estos operativizaron los proyectos mencionados a partir de 2015 y en este 2020 cosecharon los frutos al ofrecer opciones tecnológicas de apoyo a sus clientes en el marco del aislamiento preventivo.

El cambio es una constante, esa constante debe ser positiva en la ecuación empresarial para que sume al proceso, y aunque tal vez nuestros recursos financieros sean insuficientes para mantenernos 100% al día, tenemos mucha creatividad que debe ser explorada y alimentada para acortar las brechas digitales del país y acercarnos cada día más a la mejor versión de nuestro proyecto laboral y profesional.


Referencias:

Calderas, José Rubén, et al. "De la empresa tradicional a la empresa virtual: valores transformativos." Negotium: revista de ciencias gerenciales 6.17 (2010): 122-153.

Toro, Víctor Manuel. "Transformación Digital de una empresa tradicional." Sistemas 146 (2018): 24-37.

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